No sé si es el amor o la práctica, pero cada día cocino mejor. Soy más limpia, más rápida, sé de los tiempos de cocción, de la cantidad de sal, de las combinaciones posibles, de lo que le puede dar un toque especial, de lo que queda mal. Mas vale que todo este asunto de la cocina no es más que un asunto de prueba y error, prueba y error, prueba y error. El día del error es un bajón, quizás habías invitado a gente a comer y quisiste experimentar con algo nuevo. Error, grave error. Uno tiene que experimentar cuando nadie está esperando eso que vos estás cocinando. Sino, las cosas probablemente salgan mal. Es como una ley en la cocina. Una ley que inventé yo. Si te invito a comer, te invito a comer algo que sé que me sale bien. Igual, no tengo un plato exclusivo, las vegetarianidades son muy amplias. Las empanadas de quinoa y tofu me salen excelentes por ejemplo. Los guizos también, y las tartas ni te cuento. Pero hablando de todo un poco, de la cocina y sus efectos afrodisíacos, se me cuela esto del amor. Mientras corto el morrón en cubitos, mientras lloro pelando la cebolla, mientras pongo sal y azucar y pelo la papa. Será que el amor se hace mejor con la prueba y el error? Será que uno aprende a amar, tan sólo cuando ama y ama y no para de amar? ¿Es el tema de la cantidad de amores el que hace a una persona mejor amante? ¿es la calidad del producto? Qué onda con el amor?
No me enamoro, le digo a mi psicologa. No me enamoro, tengo puesta una muralla china en el sector "Amor" del cerebro. Ojalá el amor fuera como hacer una tarta. chiqui chiqui chiqui, todo cortadito, agregamos un poquito de sal, pimienta y al horno.¿Será que quizás yo le doy demasiada vuelta a algo que tiene una receta?¿Será que quizás no existe eso que estoy buscando?¿Será que busco lo que no debería buscar? Como ese alimento delicioso que no existe? Cada día cocino mejor y cada día amo peor. Cada día amo menos al otro. Cada día me amo más, y me encuentro más interesante, y me encuentro más linda, y me encuentro más sola. Será quizás que me estoy encontrando...claro. Eso es. Estoy sintiendome cada día mas torta. Estoy cada día, más segura de lo que quiero y de lo que no quiero. Estoy quizás, transformándome como Kafka. No en cucaracha, sino en mujer. Nada, mejor sigo con la zanahoria..
